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Blefaroplastia: postoperatorio y tiempo de recuperación tras la cirugía

La blefaroplastia es una intervención estética que busca mejorar el aspecto de la mirada de las personas, devolviendo la luminosidad perdida. En función del defecto que se quiera corregir, el cirujano opta por una u otra técnica. La blefaroplastia inferior elimina las antiestéticas bolsas de los ojos, quitando el exceso de grasa y piel localizado en la zona. La blefaroplastia superior termina con el exceso localizado de piel en los párpados superiores, que produce una mirada de cansancio y, en ocasiones, interfiere en la visión del paciente. En pacientes con ambos defectos se puede realizar una blefaroplastia completa, combinando las dos técnicas. El postoperatorio de ambas es muy similar.

La blefaroplastia es una intervención con resultados definitivos y favorables en la mayoría de los casos, que no modifica la forma de los ojos, pero sí mejora su aspecto. Se trata de una cirugía que raramente se realiza en personas muy jóvenes, ya que en la mayoría de los casos las correcciones que se hacen son fruto del paso de los años.

Consejos postoperatorios

Una vez realizada la operación el médico aplica una pomada oftálmica en los ojos, que durante unas horas permanecerán tapados con unos apósitos de suero frío, para ayudar a quitar la inflamación de la zona y reducir las molestias. La mayoría de los pacientes no siente mucho dolor tras someterse a esta intervención. Eso sí, es importante que se sigan unas recomendaciones durante los primeros días:

  • Mantener un reposo relativo los tres primeros días, sin realizar esfuerzos físicos para evitar que se produzca una subida de la tensión arterial y un posible sangrado. Tampoco se recomienda no cocinar o exponerse a temperaturas altas.
  • Dormir en posición decúbito supino (boca arriba) y con la cabeza algo elevada con respecto al cuerpo.
  • No realizar ejercicio físico durante la primera semana.
  • Realizar lavados con suero fisiológico y aplicar hielo en la zona. También es bueno hacer una infusión de manzanilla y guardarla en la nevera, para ir aplicándola poco a poco mediante gasas empapadas.
  • Tomar analgésicos si se siente tensión ocular.
  • No asustarse si los primeros días no puede cerrar completamente los ojos cuando se va a la cama. Esto se produce a consecuencia de la hinchazón postoperatoria y va despareciendo a medida que pasan los días. La aplicación de compresas frías en la zona aliviará la sensación.
  • Aplicar colirios y pomadas específicas, siempre bajo indicación médica, para reducir la sensación de ardor, picor, sequedad de ojo, visión borrosa o hipersensibilidad a la luz. Se recomienda el uso de gafas de sol, oscuras y grandes, durante las primeras semanas.
  • A pesar de que puede tener visión borrosa se puede leer, ver televisión o trabajar con el ordenador, siempre con moderación. Tras una blefaroplastia el paciente puede conducir pasada una semana de la intervención, siempre que no vea borroso.
  • Acudir a consulta una semana después de la cirugía, para que el médico pueda quitar los puntos de sutura y comprobar que la operación ha salido según lo esperado.
  • Usar maquillaje de ojos durante las primeras semanas, para tapar los posibles hematomas que aparezcan tras la cirugía. Por lo general no desparecen antes de los 10 o 15 días.

El tiempo de recuperación depende de la actividad que normalmente desarrolle la persona, aunque suele rondar los 10 o 12 días. Quienes trabajan con el ordenador o sentados, en menos de una semana estarán listos para volver a la rutina. El tiempo de baja se estima en unos 7 días, periodo tras el cual el paciente puede retomar su actividad normal.

Efectos secundarios de una blefaroplastia

La blefaroplastia es una intervención que, bien realizada, ofrece unos resultados óptimos. Pero hay veces que se producen efectos no deseados. En el caso de la blefaroplastia superior serían:

Sequedad permanente de los ojos. Es consecuencia de la eliminación excesiva de la piel, impidiendo al párpado superior cubrir totalmente el globo ocular. Puede derivar en una queratoconjuntivitis seca y, en algunos casos, afectar al epitelio, provocar úlceras en la córnea y disminuir la agudeza visual. También puede deberse a un exceso en la eliminación de la grasa o a una mala cicatrización.
Extirpación de más o menos piel de la necesaria. Para corregirlo es necesario volver a intervenir el párpado, no antes de cuatro meses de la primera operación.
Extirpación de más o menos grasa de la necesaria.
Daños en los músculos del párpado (se producen en ocasiones contadas).

Cuando la intervención es una blefaroplastia inferior, los efectos no deseados son:

  • Retracción del párpado, por eliminación excesiva de la piel o un daño en los tendones.
  • Cicatrización visible (no suele ser habitual).
  • Hemorragias al extirpar la grasa.
  • Visión doble.

Ante cualquiera de estos síntomas el paciente debe acudir al médico de manera inmediata. En SaludOnNet contamos con los mejores cirujanos plásticos, dispuestos a corregir cualquier defecto físico y mejorar la calidad de vida de los pacientes.